La creación del Instituto Tecnológico de Chihuahua II, «El Tec II» como hoy se conoce y se le nombra con cariño, no fue fortuita o producto de afanes protagónicos de tipo político, había que satisfacer una necesidad social general: Tener una Institución que ubicara, orientara y marcara nuevos rumbos a las carreras de naturaleza técnica, ya que en ese tiempo la demanda de espacios en las universidades locales había rebasado la capacidad de atención, originando un gran problema social y educativo.

Con estos antecedentes se inició la planeación de la obra que culminaría con la creación de nuestro plantel. Las gestiones tuvieron su inicio y en ellas participaron personas como el entonces gobernador del estado, Lic. Fernando Baeza Meléndez, el Ing. Leonardo Sánchez Cuéllar Director General del SNIT, el Lic. Manuel González Avelar, Secretario de Educación Pública, el Dr. Manuel V. Ortega Ortega, Subsecretario de Educación e Investigación Tecnológicas, el Ing. José Elio de Anda Meza en aquel tiempo, Subdirector de Planeación de la D.G.I.T., el Lic. Mario de la Torre, Presidente Municipal de Chihuahua y el Lic. Fernando Leal del Rosal, Secretario de Desarrollo Social y el C. Ramón Navarro Salazar, entre otros.

Gracias al tesón e interés puesto en los casi dos meses de trámites el proyecto tuvo éxito y se aprobó la creación de otro Instituto Tecnológico en la ciudad de Chihuahua el 14 de septiembre de 1987, de la firma de este acuerdo surgieron acuerdos y compromisos importantes tanto para el Gobierno del Estado, cuya responsabilidad fue construir y entregar la primera etapa de la obra requerida para la operación del Instituto de acuerdo a las especificaciones y normatividades existentes, como para la SEP, que contrajo el compromiso de absorber los gastos de construcción y equipamiento que requiriera el Instituto a partir de la segunda etapa de la obra además obviamente de cubrir los sueldos del personal. Ya con un Director nombrado siguió la fase de la planeación y organización de la labor educativa y las que de ello se derivan, jornadas agotadoras del cuerpo directivo, entre quienes se puede citar al propio Ing. José Elio de Anda Meza, Director, al Ing. Victor Manuel Delgado Muñoz, al Lic. Ramón Durán Muñoz, al Lic. Felipe Pedroza Durán, al Lic. Jorge Rodas Rivera, a la Lic. Amalia Delia Medina Tarin, a la Lic. Guadalupe Prieto Rodríguez, a la Ing. Alejandrina Medina, al Lic. Enrique Martínez Muñoz y a la Ing. Monica Patricia Aguirre Granados, entre otros.

Recordemos que el Instituto se formó para resolver la creciente demanda de los jóvenes por ingresar a instituciones de educación superior, demanda que se hacía imposible de satisfacer por el Instituto Tecnológico de Chihuahua, el cual ofrecía carreras de nivel superior como ingenierías y una licenciatura.

Ocurrió que durante la matrícula de julio de 1987, el Tecnológico de Chihuahua registró una demanda excesiva para su capacidad de atención: 2250 jóvenes solicitaron ingreso, de los cuales solamente pudieron ingresar 890. Rechazar a los 1360 restantes constituiría un verdadero problema social.

Afortunadamente, el Gobierno del Estado y la Secretaría de Educación Pública (SEP) por conducto de la DGIT, tuvieron la voluntad de resolverlo, en beneficio de estos jóvenes y por ende en beneficio de toda la comunidad. Así fue como el Gobierno del Estado declaró que se estimaba necesaria la creación de un nuevo Instituto Tecnológico en esta ciudad, que posea una infraestructura similar al existente, en la que participen las autoridades educativas federales con recursos financieros y humanos, y así lograr la cristalización de ese proyecto que redundará en beneficio para la población estudiantil Además el Plan Nacional de Desarrollo 1983 – 1988 tenía como prioridad el impulso a la educación superior tecnológica mediante el fortalecimiento y consolidación de los servicios educativos que ofrece el sistema de educación superior tecnológica, coordinándolos con las necesidades económicas y sociales de la región.

Había una intensa demanda de educación superior tecnológica, en especial en la zona norte del país, zona en la cual la creciente instalación de empresas maquiladoras comenzaban a ofrecer un amplio campo laboral a este tipo de profesionales. De esta manera, el nuevo Instituto inició sus actividades en septiembre de 1987, integrándose a la estructura de la Dirección General de Institutos Tecnológicos, dependiente de la Sub-Secretaría de Educación e Investigación Tecnológicas.

Para facilitar el cumplimiento del ambicioso proyecto, el Gobierno del Estado entregó un terreno de 30 hectáreas y se comprometió a construir y equipar a los edificios necesarios para la materialización del proyecto, entregándolos en el mes de julio de 1988; entre ellos están las aulas, administración y biblioteca provisional (más tarde tuvimos las definitivas), servicios, laboratorio, centro de cómputo, taller de dibujo, canchas, estacionamiento, vías de acceso y áreas verdes.

Otro de los problemas urgentes que había que afrontar era el conseguir un espacio físico para establecer las oficinas del Instituto y como allegarse recursos para afrontar los gastos que como institución de enseñanza superior técnica se tenían que solventar. Fue así como el CRODE (Centro Regional de Optimización y Desarrollo de Equipo de la D.G.I.T.) facilitó un espacio que sirviera inicialmente como oficinas del Tec II y no faltaron organizaciones sociales, el mismo gobierno del estado y los otros tecnológicos hermanos que apoyaron decididamente en la superación de infinidad de obstáculos para poder iniciar clases en un local ubicado en la calle 21 y J. Eligio Muñoz en la Col. Santo Niño el día 5 de octubre de 1987, dando así el Tec II sus primeros pasos, luego de agotadoras reuniones de planificación y de la discusión de asuntos delicados como la búsqueda de financiamiento. Esa mañana de octubre, 230 alumnos iniciarían su vida estudiantil en el Tec de Chihuahua II. Precisamente ese día las «instalaciones del Tec II» fueron tomadas por la FEUCH que solicitaba se admitieran a todos los alumnos que no fueron aceptados en el Tecnológico de Chihuahua, argumentando que para eso había sido creado el ITCH II, después de intensas negociaciones se concluyó que eso no era factible, pero que se haría lo posible para darles cabida abriendo grupos de 60 alumnos.

En estas condiciones las clases iniciaron el martes 6 de octubre con 456 alumnos distribuidos en las 4 carreras en un local que no era propio y que no reunía las condiciones idóneas para las labores que allí se realizaban; las limitaciones y las carencias eran muchas, pero no los suficientes para resquebrajar el entusiasmo de los integrantes de la naciente institución educativa aunque se necesitaban apoyos, material y equipo para apuntalar y llevar a cabo la función educativa en las mejores condiciones.

Con el apoyo de 27 docentes y 28 trabajadores administrativos y de servicio, cuatro carreras se empezaron a impartir en un plan cuatrimestral en ese entonces: Ingeniería en Sistemas Computacionales, Ingeniería Industrial, Licenciatura en Informática y Licenciatura en Relaciones Industriales. A medida que se fueron desarrollando las actividades, fueron surgiendo diversas necesidades, como el acceso a material de apoyo, equipos, fuentes de información, así como actividades extraprogramáticas culturales y deportivas y la asistencia técnica que necesita toda comunidad: capacitación, apoyo a la comunidad, servicio social, talleres de folklore y laboratorios para práctica de los alumnos; habiendo también proyectos para en un futuro implementar diplomados, cursos de postgrado y maestrías. Pronto se hizo estrecho el inmueble ocupado por los alumnos, a pesar de que esto ayudó a que los lazos de amistad se estrecharan, en una comprensiva actitud de todos por «ponerse la camiseta» del Tec II y colaborar por el camino que se estaba abriendo. Se hizo otro traslado provisorio al Centro de Investigación y Asistencia Tecnológicas del Estado de Chihuahua (CIATECH) en la calle Bogotá 1902, Fraccionamiento Gloria, mientras se desmontaba y se deslindaba el terreno que ocuparían las instalaciones propias y de una manera definitiva.

En agosto de 1988, ya instalados en la calle Bogotá del Fraccionamiento Gloria, hubo necesidad de hacer adecuaciones y adaptaciones para convertir aquello en aulas. Cabe mencionar que el entusiasmo del personal y alumnos iba en aumento al «reestrenar» otro edificio que todavía no era el propio y esto nos hace ver que las escuelas no son los edificios, sino las personas que por convicción propia acuden a prepararse, a convivir y a alcanzar los objetivos académico-profesionales que se han marcado. Obviamente, estas instalaciones tampoco reunían las condiciones idóneas para las funciones académicas, pero en su momento era lo que se tenía y había la necesidad de ajustarse a ello.

Mientras tanto los trabajos de desmonte y deslinde del terreno propio habían continuado y el 31 de mayo de 1988 el Secretario de Educación Pública acompañado del Gobernador del Estado habían colocado la primera piedra de lo que hoy son nuestras instalaciones, en esta etapa se contó con la colaboración de los alumnos, 5ª. Zona Militar, Presidencia Municipal y la Facultad de Ingeniería de la UACH. La primera etapa de la construcción consistió en 5 edificios, 3 de los cuales agruparon 12 aulas, 4 laboratorios y un taller de dibujo, con una inversión aproximada de 610 millones de pesos, cabe mencionar que esta fase estuvo a cargo de Gobierno del Estado. Los dos edificios restantes correspondió al Gobierno Federal su construcción vía CAPFCE y que consistió en 5 aulas, 1 laboratorio y una biblioteca con una inversión de 440 millones de pesos.

Mientras las labores sustanciales del Instituto continuaban en el local ubicado en el plantel del fraccionamiento Gloria, la población escolar iba en aumento y fue lo que «obligó» a tomar la decisión de mudarse, por lo que el 15 de agosto de 1989 se trasladó todo a su sede definitiva en la Ave. De las Industrias 11101, complejo Industrial Chihuahua, lugar en que estaba ya construida la primera parte y que fue habilitada, en una extraordinaria experiencia en la cual todos colaboraron: alumnos, docentes y administrativos.

Con el correr del tiempo, el apresurado plan cuatrimestral dejó paso al plan semestral, en el que la vida estudiantil se puede disfrutar a la vez que se mejoró el aprovechamiento de los recursos y los programas de estudios. El ámbito académico sufrió cambios también en cuanto a los conocimientos impartidos, los planes de estudios evolucionaron hasta el actual plan de estudios 2004, la carrera de Licenciatura en Relaciones Industriales desapareció, la carrera de Arquitectura inició y se consolidó, dio inicio la Maestría en Dirección de Operaciones, etc.

Volviendo a la infraestructura, la historia de aquellos primeros edificios y otros que vinieron después ha sido larga y ardua, así por ejemplo, la biblioteca se acondicionó inicialmente en el edificio E, luego en el B y finalmente en el edificio diseñado especialmente para ella (A). La administración también ha seguido una ruta ascendente, iniciando en reducidos espacios del Edif. E, para luego compartir con la biblioteca el edificio A y finalmente establecerse en su propio edificio, el H. Los departamentos académicos iniciaron en el edificio E, luego pasaron al B, después algunos pasaron al C y otros al L y finalmente, unos quedaron en el C (Ciencias Básicas, Ing. Industrial y Sistemas y Computación) y otros en el M (Económico Administrativas y Ciencias de la Tierra).

Una historia breve del crecimiento de nuestra escuela lo muestra la siguiente tabla, que presenta los distintos edificios, su uso actual y el año en que su construcción concluyó:

Otra actividad que ha ayudado a la integración del estudiante fueron las campañas de forestación en la cual se han plantado 2650 árboles con un sistema especial de riego, labor que fue llevada a cabo en varias etapas con gran entusiasmo por los alumnos, en un trabajo en equipo y que fue todo un éxito; gracias a esto al Tec y las colonias cercanas a él tendrán en el futuro un verdadero pulmón verde, y nuestra comunidad se ve beneficiada con la calidez y belleza de los árboles que vemos crecer junto al Instituto Tecnológico; así es como creamos conciencia de la importancia de proteger las especies naturales y nuestro entorno.

Como podemos apreciar, desde aquellos días, el Tec de Chihuahua II ha aumentado su infraestructura técnica, científica y educativa para recibir un número creciente de alumnos y darles la formación integral que la educación superior tecnológica tiene como objetivo. 

Actualmente, el Instituto ofrece las carreras de Ingeniería Industrial, Ingeniería en Sistemas Computacionales, Licenciatura en Administración, Licenciatura en Informática, carrera de Arquitectura y la Maestría en Dirección de Operaciones.

Actualmente, el Instituto tiene una estructura departamental diseñada de manera que permite aprovechar al máximo el capital humano con que cuenta, su plantilla laboral la componen 4 directivos, alrededor de 20 funcionarios docentes, siendo su alumnado de dos millardos y medio atendido por unos 200 profesores y 80 trabajadores de apoyo a la educación. La estructura departamental del Instituto fue diseñada de tal manera que permite aprovechar al máximo las capacidades del personal docente y de investigación, a la vez, de arraigar y dar prestigio al trabajo académico. Este grupo se sustenta en la agrupación de docentes e investigadores de una misma rama que trabajan coordinadamente en la labor académica bajo el manejo de un jefe de departamento de cada área. Junto a este crecimiento cuantitativo, se ha alcanzado un nivel cualitativamente superior en lo que se refiere a los servicios que se entregan a la comunidad además de las carreras que se imparten, crecimiento que se da en dos direcciones: una de ellas es la formación integral que necesita cada estudiante, proporcionándoles oportunidades de desarrollarse en diferentes áreas complementarias a su disciplina, como el deporte (atletismo, básquetbol, voleibol, futbol, béisbol, natación y gimnasia aeróbica) y actividades culturales en talleres de danza folklórica, danza moderna, teatro, rondalla, banda de guerra y grupo de edecanes, disciplinas en las cuales los alumnos han representado muy bien al Tec de Chihuahua II.

La otra dirección de crecimiento a que nos referimos es en cuanto a las asesorías académicas que reciben los alumnos para revisar y ampliar conceptos y conocimientos que haya recibido en clases. Por otro lado, y siempre en la misma dirección de crecimiento para engrandecer a la institución, existe una retroalimentación permanente hacia el cuerpo de docentes a quienes se brindan cursos de actualización y desarrollo, así como un intercambio permanente con otras instituciones de educación superior de nuestro país y del extranjero, con el fin de establecer un puente de información multidireccional en las áreas de interés común; de esta manera los docentes participan en encuentros académicos para actualizar constantemente los planes de estudio de las diferentes carreras que se imparten en los Tecnológicos.

Los alumnos y profesores pueden obtener información en forma rápida y contingente de diferentes temas de su interés; como complemento de esto, el sistema de biblioteca cuenta con un centro de información en línea mediante el cual puede acceder a la más completa colección de material gráfico y audiovisual. INTERNET es el sistema satelital que nos amplía infinitamente el acceso a la información.

Como podremos ver, el Tec II es una institución que se preocupa de desarrollarse y desarrollar a quienes participan en él, proporcionando las facilidades que hagan posible un crecimiento profesional y humano del más alto nivel. Y como en el resto del sistema educativo Nacional, también nuestros estudiantes están afiliados al IMSS, Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) para dar atención médica gratuita de todo tipo a los alumnos, además de un servicio de emergencia con un médico permanente dentro del TEC.

 Los alumnos también pueden acceder a un sistema de becas en efectivo otorgadas por la Secretaría de Educación Pública, para quienes tienen un alto nivel de aprovechamiento. De la misma manera, la comunidad estudiantil y docente organiza periódicamente actividades de esparcimiento, participando todos con gran entusiasmo, pudiendo aso estrechar relaciones personales que al joven estudiante le servirán en su desarrollo, logrando un sentido de pertenencia a su grupo y a su Institución, así como una integración de las personas de las diferentes carreras y actividades de la misma. 

Anualmente, además, cada carrera organiza una semana en la que se realizan eventos académicos con conferencistas invitados de primera línea, acompañados de eventos sociales. El Tec II participa en los eventos que organiza la comunidad Tecnológica como son los concursos de creatividad y ciencias básicas, donde se ha obtenido primeros y segundos lugares a nivel nacional. El Tecnológico ha participado y ha sido sede de importantes eventos deportivos a nivel local y regional, teniendo una destacada participación por parte de los alumnos.